no estaba muerta...andaba de parranda

Aveces la vida avanza sin esperarte, sin dejarte tiempo para digerir lo que vives en ese instante, y te sientes casi en tercera persona, un espectador pasivo de una película contigo como protagonista...sin haber leído el guión. Cuando sucede estoy sientes que corriste una maratón con tus pies moviéndose a metros delante de ti, una vez alcanzada la meta, entras en un estado de coma consciente...pienso que es por eso que los atletas suelen seguir corriendo y disminuyen de a poco su velocidad. Pero en mi caso, siento que el desdoblamiento que sufrí aun no me devuelve el alma al cuerpo, aun sigo por ahí viajando y lo que veo en el espejo es solo la cascara de mi yo....a la vez siento que mi piel no me protege de mi entorno y todo me llega sin filtro alguno. Tanto trate de protegerme de mis propias emociones, evitando quedar a solas con mis pensamientos, tanto evite incluso escuchar musica para no estimular ninguna emocion, pensando que así no sentiría, no extrañaría, no me desconcentraría de mi meta que una vez cruzada la linea final, siento que quizas nada de esto fue real.....que quizas fue una realidad imaginaria....

Un viaje ficticio o una vida pasada.... Sobretodo, me complica hilar los hechos, las experiencias, lo ilógico de lo vivido. Aun sigo digiriendo las historias y tratando de escribirlas antes que la rutina me las quite nuevamente en una niebla de olvido y confusión, porque en viajes solitario, el problema es que lo vivido sin ser compartido es como que nunca pasó....

y tengo miedo de transformarlo en mi cabeza en algo ajeno, en algo sin contornos y colores deslavados por el olvido de un secreto no compartido.....