un clavo tras otro

No sé qué me pasa, sé que hago mal, pero no lo puedo evitar, se me sale.....

baja la mirada y toma de su café. El cigarro esta por terminarse y el humo sale de su boca tapándole los ojos.

es como si me viera en tercera persona....no sé como me aguanta...a veces, creo que no la merezco....

de hecho no la mereces, no tienes derecho a tratarla así, tu sabes lo que pienso de eso.

apaga el cigarro y lo aprieta contra el cenicero hasta que la colilla se arruga como una oruga seca.

Pero yo la amo, de verdad....y quiero cambiar, en serio....

...entonces déjala ir, si tanto se supone que la quieres.

Me mira con una mezcla de desafío y tristeza, enciende como por reflejo otro cigarro, mientras yo me tomo el café expreso.

Anoche la llamé y apenas me habló.

Yo no te habría contestado el teléfono.

Está distante conmigo, y yo sólo quiero decirle que olvidemos todo el asunto y sigamos juntos.

Estás loco! pretendes hacer como que no pasó nada?? Cada vez que la tratas mal dejas una huella....y pretendes que haga como si nada??? No puedes ser tan sinvergüenza, las cosas cambian, el amor también pierde la paciencia!!!

Pero no me retes, si yo de verdad la quiero!....haría cualquier cosa por volver atrás....

Pero ya no puedes, cada vez que le gritaste, cada vez que trataste de cambiarla....sembraste el final del asunto. Ahora solo cosechas!

Como eso?

No te hagas el tonto además. Es como una puerta a la que le clavas clavos, uno tras otro, ...cada vez que le hiciste daño fué un clavo más......llenaste la puerta con clavos y ahora pretendes que la puerta sea la misma?? ni sacando los clavos, ni barnizandola, ni poniendo masilla....los agujeros siguen ahí......

No seas cruel, no lo hice a propósito....

...pero lo hiciste. Y esa puerta ahora se cerró y te dejó fuera. Que pretendes hacer? derribarla?? para que? para seguir clavándole clavos???

El garzón nos cambia el cenicero y pregunta si queremos algo.

Sabes, yo me tengo que ir, tengo cosas que hacer.

Me levanto y lo dejo solo con su café y sus pensamientos. Al salir lo miro a través del vidrio y veo a un hombre solitario, triste y de cierta manera enfermo....enfermo de amor, de celos, de mañas que no lo dejan ser libre, no lo dejan amar, no lo dejan dejar su soledad. Por un momento me da pena, solo por un momento...pero al guardar mi encendedor en la cartera, veo las llaves que solían ser de ella, las llaves que él le dió para que entrara y saliera de la casa y que ella me entregó al sacar sus cosas. ....Ella cerró la puerta por fuera con llave y partió despidiéndose desde la ventana del auto hasta que ya no la vi más.