domingo, 31 de agosto de 2008

una tarde con Vincent

No puedo decir con certeza cuánto tiempo soñé con venir a verte, pero el nudo en mi estomago me recuerda el primer beso...si así de adolescente me siento, me tiemblan las manos de emoción y a pesar de la lluvia para mi hay un sol brillante.

Al bajar del tranvía abro mi paraguas y los colores inundan mi retina. Las banderas en la entrada son sólo el preámbulo visual de lo que me espera, mi ansiedad me hace prender un cigarrillo, el primero en casi tres meses, pero la ocasión lo amérita.

Camino con paso aparentemente firme, pero mil pensamientos me recorren, que será lo que piense al entrar, como me sentiré, es verdad que estoy al fin aquí??? Me acerco a una pareja y les balbuceo en mi precario holandés que yo les tomo una foto si ellos me toman luego una en la entrada, les pareció un trato justo, ellos querían retratarse felices juntos y la típica foto de brazo estirado con las caras en primer plano, realmente queda fuera de lugar aquí,..... pero yo salía lejos ganando con el trato, nunca más los volví a ver, pero los recuerdo casi con cariño, por haber eternizado ese momento en mi cámara, por haber compartido conmigo esa alegría.

Al fin, cara a cara con Vincent.

-Aquí estas, viejo compañero de tardes sin inspiración, hojeándote en mil libros que tengo llenándose de polvo en mis repisas, aquí estas esperándome al fin, después de tantos intentos por venir a visitarte...aquí estás...y no estás. Me demoro casi una hora en solo entrar, se que suena exagerado, pero tiemblo entera y quiero saborear el momento, este instante antes de la primera vista, del primer encuentro.

Compro mi entrada, mi tur con audifonos y escondo mi cámara; quizás pueda- y contra toda norma,- robarte una foto, sin flash claro....aprieto ese pequeño trozo de cartón con tus girasoles en él, respiro profundo y entro,..... el primero en recibirme es Rembrandt, mi sorpresa no es menor que mi decepción, en cualquier otro momento ese retrato oscuro me habría fascinado, pero solo tengo ojos para Vincent y lo busco en el salón entre tantos otros turistas. La masa se mueve inerte entre los cuadros, se detienen un segundo ante cada uno, doblan la cabeza como asintiendo la obra, balbucean opiniones y siguen su camino, cada imagen con su historia, cada pincelada con un gesto tuyo, ahí están y parecen no verlos realmente. La condesa Tal y Tal y el duque de tal ciudad, los campesinos comiendo papas, los campos de trigo y los jarrones de naturaleza muerta, todo es asimilado por los espectadores y tu quedas en segundo plano. Lo que quisiste decir, quedo sin ser comunicado, la masa sigue su recorrido sin percibir la belleza de cada trazo y yo intento en vano de escuchar cada descripción por los audifonos; trato de respirar profundamente el olor a oleo de cada cuadro, para sentirte un poco menos lejano. -Que quisiste plasmar? qué te llevó a tanto dolor cubierto de tonos ocre? la voz inmutante del relator no me da respuestas, no me dice qué cosas pensaste ese día antes de retratar a la prostituta de este cuadro, no me cuenta que pasaba por tu mente.

"Colors changing hue morning fields of amber grain weathered faces lined in pain are soothed beneath the artist's loving hand. "

Doy tres vueltas por la galería antes de entrar al salón que tiene la foto de tu tumba, antes de leer sobre tu muerte, antes de leer una carta a Teo de tu propio puño y letra.....tu escritura ahí bajo un vidrio reforzado, con los bosquejos de algún cuadro que le comentabas a tu hermano y te siento más lejano que nunca. La masa sigue inherente, salen del museo tal y como entraron, sin huella alguna de haber estado frente a los mismos lienzos que tu, indiferentes a las manchas de oleo en tus manos y a los esfuerzos por drenar tu mente atormentada. Los miro desde lejos y un guardia se me acerca para decirme que están por cerrar.

Me deja recorrer una vez más el salón con los cuadros de tu casa de pintores y respeta mi silencio frente a la noche estrellada sobre alerces, quizás el comprende mas de tus obras, quizás el que pasa todos los días por aquí logro entenderte mejor que nosotros turistas, quizás podría responder a mis preguntas, pero su cansancio es obvio y mi holandés no da para conversar sobre arte, sobre vida y sobre muerte asi que salgo a la noche de Amsterdam y camino hacia el barrio bohemio. Los canales reflejan las luces del distrito rojo y el frío me deja una marca pálida en el rostro. Entro a un café y pido un vaso de Absinth, para ver si sus efectos me acercan a tu locura y de fondo suena Mc Lean con voz aspera y melancólica, como tratando de prestarme sus palabras para describir ese momento.

"For they could not love you but still your love was true and when no hope was left in sight on that starry starry night. You took your life as lovers often do; But I could have told you Vincent this world was never meant for one as beautiful as you. "

Entre mis manos, una replica de tu cuadro mas famoso, en mi bolsillo, la entrada al museo y en mi futuro recuerdo, la tarde que toque un lienzo pintado por van Gogh.

" And now I think I know what you tried to say to me how you suffered for your sanity how you tried to set them free. They would not listen they're not list'ning still perhaps..... they never will. "

2 comentarios:

La F dijo...

Y pudiste tomar alguna foto oculta? ojala que si... por lo menos yo en cada salida importante y especial guardo recuerdos... y bueno, los recuerdos que más me gustan son las fotografías :D

Encontré tu blog leyendo otro blog y asi sucesivamente.. la cosa es que estoy aqui leyendo y me encantó!

Saludos!

FABIOLA

Anónimo dijo...

Esto es lo que hace rato querías escribir no?... valió la pena la espera creo...

En fin... no sabría que posse poner de sacarme una foto en la entrada a la casa de algún idolo (con más de 100 años muertos... que no es menor)... probablemente saldría con cara de despistado, mirando hacia otro lado y porsupuesto con los ojos rojos... tampoco se si tengo un idolo que me genere tales sentimientos de - valga la redundancia - idolatria... Bukowski quizás, pero su naturaleza implica que uno ni siquiera se entusiasme de ir a verlo por temor a que aparezca y te eche a patadas de su tumba... y Morrison está en París y Francia seguro y es lo último que quiero ir a visitar...

No puedo dejar de lado el hecho que te pasaste de largo al pobre y adolorido de Rembrandt... jum... y todo por el tipo sin oreja?... de lo poco que se (en general) creo que R. es uno de los mios... creo... al menos la pelicula, aquella con Jason Patric... (el de Generación Perdida) me gustó... jajaja...

Bueh... y quien lo mandó a tomar tanto ajenjo... acaso no vio lo que le pasó a Anthony Bourdain o al amanerado de Oscar Wilde?... en París era que no... (aunque dado que A.B. tiene un prgrama de televisión en el siglo XXI es dificil que lo haya visto...)

Disculpa lo poco serio...

Nada... envidia ante todo... cuestionamientos olvidados ante todo... ¿que tumba quisieras visitas? ¿que museo, por sus obras, quisieras visitar?... peor aun, ¿que vas a hacer una vez que llegues alla?... jum... nose... supongo que lo mio no son los museos, supongo que lo que yo añoro está en otras partes, pero no por eso no dejo de ver tu amor por aquellas cosas que para mucha gente - mucha de la que ese día acompañaba tus pasos - no supera lo que para ti se convirtió - estoy casi seguro - en uno de esos días incluidos entre los 5 mejores de la lista...

no?

frase del día